El vino que tiene Asunción para ella y los borrachos. El vino que, desde la Biblia pasando por el hijo del "fabricante de tiendas" y que se liba, más que se bebe, con devoción y con él se canta a la amistad, ese, ese es que bebo yo.
Ponme vino en los labios
Juan José Vélez Otero
Ponme vino en los labios. Ya no tengo otro afán
que el olvido y la dicha de los líquenes blancos.
El sereno silencio me ha marcado en estigma
con letargo de dioses y crisálidas negras.
Ponme vino en los labios con los tuyos. (La copa
no me importa que sea del color de tu carne
ni del tibio cristal de tus muslos desnudos).
Dame vino en la llave poderosa que abra
las entradas al mar del constante abandono.
Ponme vino despacio a la orilla del sueño.
Soy así Omar Khayyam
¿Que yo del vino soy devoto ciego?
Y bien, lo soy.
¿Que soy infiel, idólatra del fuego?
Y bien, lo soy.
Cada uno de mí en su idea fía;
mas yo, dueño de mí, tengo la mía:
Soy lo que soy.
Lilac Wine
Jeff Buckley
Vino de lilas
Me perdí en una noche fría y húmeda me rendí ante esa luz neblinosa
fui hipnotizado por un placer extraño
debajo de un lilo
Destilé vino del lilo
Puse mi corazón en su receta
Me hace ver lo que quiero ver
y ser lo que quiero ser
Cuando pienso más de lo que quiero pensar
hago cosas que nunca debería hacer
Bebo mucho más de lo que debería beber
porque me devuelve a tí…
El vino de lilas es dulce y embriagador
como mi amor
Vino de lilas, me siento inestable, como mi amor
Escúchame…
No puedo ver con claridad
¿Acaso no está él acercándose a mí?
El vino de lilas es dulce y embriagador, ¿dónde está mi amor?
Vino de lilas, me siento inestable, ¿dónde está mi amor?
Escúchame, ¿por qué es todo tan confuso?
¿Acaso es él, o es que me estoy volviendo loco, cariño?
"Confórmate con saber, únicamente, que todo es misterio; la creación
del mundo y la tuya, el destino del universo y tu suerte. Sonríe ante
estos enigmas como ante un peligro que desdeñaras. No creas que
lograrás saber algo al franquear el umbral de las tinieblas. ¡Paz a
los hombres en el negro silencio del más allá!"
Rubaiyat Omar Khayyam
Fado: del latín. Fas, fatum (destino).
Rosa Branca
Mariza
"Tantas vueltas di bailando
que la rosa se deshojó"
Para Elisa (Für Elise-WoO 59)
Ludwig van Beethoven
Carl Vilhelm Holsoe - A Lady Playing The Piano
Corría el año 1810 cuando el compositor alemán Ludwig van Beethoven compuso la tal vez más conocida, (junto con la Sonata op. 27 n.º 14 «Claro de luna» y el primer movimiento de la Quinta Sinfonía), de sus composiciones para piano: Für Elise.
La noche anterior el compositor había sido invitado a una reunión musical donde conoce a una joven interprete de piano llamada Theresse. La jovencita interpreta varias composiciones pero ninguna del viejo gruñón y celebre compositor Ludwig van Beethoven. Al terminar el músico le pregunta a Theresse que por qué no ha ejecutado ninguna pieza suya y ella contesta que le resultan muy complicadas. Por eso, se enternece y compone esa noche un tema de fácil interpretación y se lo dedica.
Pero esta celebérrima bagatela para piano debe su popular nombre, según parece, a la confusión de algún copista a la hora de transcribir el manuscrito original de la partitura. Debido a la mala legibilidad de la dedicatoria, donde parecía estar escrito «Elise» debía leerse, en realidad, «Therese». Así, la composición en realidad es «Para Teresa».
Además la canción más tocada por principiantes en la historia es probable que el tempo (velocidad) con el que se toca no sea el que escribió Beethoven en la partitura original, ya que ésta se perdió.
Triste destino el de Theresa, un genio le dedica una obra y le arrebata el honor de pasar a la historia de la música un simple giro del destino.
A simple twist of fate (Bob Dylan) Bryan Ferry
Un sencillo giro del destino
Se sentaron juntos en el parque
cuando al atardecer se oscurece el cielo
ella le miró y él sintió un chispazo
estremeciendo sus huesos
fue entonces cuando él se sintió sólo
y deseó enmendarse
y tener cuidado con un simple giro del destino.
Caminaban a lo largo del viejo canal
un poco confusos, lo recuerdo bien
y se pararon en un extraño hotel
con una brillante luz de neón
él sintió que el calor de la noche
le golpeaba como un tren de carga
moviéndose con un simple giro del destino.
Afuera sonaba un saxofón en algún sitio lejano
cuando ella paseaba cerca de la calle
mientras la luz irrumpía a través de una desgastada pantalla