lunes, 26 de septiembre de 2011

Caretera y manta


El día 3 de octubre, carretera y, en realidad, chubasquero que nos vamos a Galicia y por esas tierras chispea una mijina y me da a mi que el "hombre del tiempo" de RTVE 1 y paisano José Miguel no van a hacer una excepción por muy vecinos que seamos y nos va parar la lluvia.

Chove en Santiago
Luar na Lubre


Bueno (no se lo digáis a nadie que nos dirán "antiguos" y no estar a la page por no pertenecer a la marea de conversos del "por el camino al cielo", devotos peregrinos vestidos de Capitán Tapioca e intrépidos devotos del Goretex hacia Dios) decía que ir a ver al Señor Santiago Matamoros es una excusa, donde en realidad vamos es al monasterio de San Andres de Teixido o San Andrés "Do cabo do mundo", pues según se cuenta "el que no va vivo tiene que ir muerto (Que non vai vivir despois da morte vai) y claro mejor lo primero que uno no quiere verse como Fiz de Cotovelo, el alma en pena, de la película "El bosque animado"



Ya que las leyendas, mucho más ciertas que la historia oficial ¡Donde va a parar!, cuentan que este Santo, algo envidioso de la afluencia de peregrinos a Santiago, mucho mas famoso el de Compostela ya que era el "top star" de las peregrinaciones y además tenia ventaja, un GPS medieval: la Vía Lactea, permanecía triste y apagado. Un día recibió la visita del mismísimo Señor en compañía de San Pedro. Como quiera que el Santo formulara sus quejas a tan insignes autoridades el Todopoderoso le prometió que a su santuario acudirían en romería todos los mortales y, quien no lo hiciera de vivo, vendría a verle de muerto.
Y dicen, los que saben o sea los viejos del lugar que, en esta tierra tras la romería de septiembre y al caer la noche se escuchan el sonido de pasos perdidos en la oscuridad y lamentos de pecadores arrepentidos en busca del perdón del Santo Apóstol. Dicen en esta tierra que se ha de llegar en vida al lugar del Santo y temen que, al llegar la última hora, no exista descanso para los mortales de mala condición que en su inmensa incredulidad y rebeldía no hayan ofrendado al Santo con, al menos, una visita al santuario.
Pues eso, que no es nuestra intención incrementar el número de procesionarios de la Santa Compaña.


Y entre pulpo y pulpo, mejillón y mejillón y algún que otro lacón con grelos que aunque no es temporada hoy en día con las técnicas, que adelantan una barbaridad, ya hay grelos todo el año, decía que  ya que vamos no estará de más cumplir con ambos santos varones que las envidias son muy malas y luego pasa lo que pasa...

Muñeira da Chantada
Milladoiro




2 comentarios:

Elena dijo...

Pero porqué tenéis que contar estas cosas? Y qué pasa con los que nos quedamos aquí? Muertecitos de envidia... malos más que malos! ;)

José M. Escudero Gómez dijo...

No te quejes, no te quejes...